La Universidad de Alcalá dona libros a la Biblioteca en recuerdo de las víctimas del 11-M

La Universidad de Alcalá de Henares ha realizado una donación al Ayuntamiento de Azuqueca de Henares de 400 euros destinada a la adquisición de fondos bibliográficos en recuerdo de las víctimas del atentado del pasado 11 de marzo en Madrid, del que mañana se cumplen cinco meses, y que terminó con la vida de cinco vecinos de Azuqueca, entre todos los fallecidos.El director del Programa de la Universidad de Maryland en Alcalá de Henares, José María Naharro-Calderón, fue el encargado de entregar los fondos correspondientes que recogió el alcalde de Azuqueca, Florentino García Bonilla, y la concejala de Cultura, Oti Sánchez, "agradeciéndole profundamente a la Universidad este gesto tan simbólico en nombre de todos los azudenses y especialmente de las cinco familias de los fallecidos y de las personas heridas y afectadas en esa terrible jornada para todos nosotros".Todos los libros que adquiera la Biblioteca Municipal con esa donación llevarán inscrita la leyenda "In memoriam. 11 de marzo de 2004", acompañada, bien de la frase "Conservar algo que me ayude a recordarte sería admitir que te puedo olvidar" de William Shakespeare, o del verso de Juan Ramón Jiménez "... y yo me iré, y se quedarán los pájaros cantando", ambas elegidas por la propia Universidad. La edil de Cultura azudense ha calificado la iniciativa de la Universidad alcalaina como "un gesto precioso y una manera muy acertada de recordar lo que, los que lo vivimos, no podemos olvidar; un sentimiento que quedará reflejado de manera perpetua en estos libros". Sánchez comparte con la institución complutense que "el fomento de la cultura y el conocimiento es la mejor arma para combatir la sinrazón y la barbarie, no las guerras y el odio, que lo único que hacen es generar más odio".En esa misma línea, la Biblioteca Municipal de Azuqueca lleva dos años organizando unas Jornadas Interculturales, que permiten el intercambio de culturas y costumbres y el conocimiento mutuo. Por su parte, el Ayuntamiento lleva casi una década acogiendo alumnos de la Universidad de Maryland, que realizan parte de sus prácticas de español en distintos departamentos municipales, entre los que está incluida la Biblioteca.